RESUMEN
La
ciencia y la tecnología aplicada a los alimentos provee de gran expectativa
para la salud humana sin embargo situaciones globales de índole climático,
políticos y socio-económicos ponen en peligro ponen en peligro la seguridad
alimentaria a nivel mundial y local, razón por la cual se trazó como objetivo realizar
un diagnóstico situacional de nuestro país frente a los riesgos de inseguridad
alimentaria y hacer algunas sugerencias que contribuyan en las políticas y
gestión pública. La metodología utilizada fue la documental, se revisaron
revistas como la Nature, Science, American Journal of Climate Change, Scielo y
en la página web del Google académico. Así mismo se hicieron revisiones de
reportes periodísticos y páginas web de diferentes instituciones públicas. para
todos los casos se utilizó las palabras clave seguridad alimentaria. Se llego a
la conclusión de que el Perú no tiene política ni gestión pública para la
seguridad alimentaria de la población en general para situaciones de desastres
naturales u otros.
Palabra clave: Seguridad alimentaria
y cambio climático.
ABSTRACT
Science and technology applied to food provide great
expectations for human health, however, global climatic, political and
socio-economic situations endanger food security at the global and local
levels, which is why the objective was to carry out a situational diagnosis of
our country regarding the risks of food insecurity and make some suggestions
that contribute to public policies and management. The methodology used was
documentary; journals such as Nature, Science, American Journal of Climate
Change, Scielo and the academic Google web page were reviewed. We also reviewed
journalistic reports and web pages of different public institutions. In all
cases we used the key words food security. It was concluded that Peru has no
policy or public management for food security of the population in general for
situations of natural disasters or others.
Keywords: Food security and climate change.
INTRODUCCIÓN
La FAO
(2023) define “Seguridad Alimentaria: a nivel de individuo, hogar, nación y
global, se consigue cuando todas las personas en todo momento tienen acceso
físico y económico a suficiente alimento, seguro y nutritivo, para satisfacer
sus necesidades alimenticias y sus preferencias, con el objeto de llevar una
vida activa y sana. Y la Inseguridad Alimentaria: “Insuficiente ingestión de
alimentos, que puede ser transitoria (cuando ocurre en épocas de crisis),
estacional o crónica (cuando sucede de continuo)”. Además, en 2013, introdujo
una escala de experiencia de inseguridad alimentaria: inseguridad alimentaria
leve: se produce cuando la capacidad de acceso a los alimentos presenta
incertidumbre. Inseguridad alimentaria moderada: se produce cuando la calidad y
variedad de los alimentos se deteriora, o la cantidad consumida se reduce
drásticamente, o se omiten por algunas comidas. La inseguridad alimentaria
grave se produce cuando no se consumen alimentos durante uno o más días. Y
finalmente la FAO (2022) reporto que las principales razones del aumento de la
inseguridad alimentaria aguda en 2021 fueron: - Los conflictos (el principal
factor que empujó a 139 millones de personas a la inseguridad alimentaria aguda
en 24 países/regiones, frente a unos 99 millones en 23 países/regiones en
2020); - fenómenos meteorológicos extremos (más de 23 millones de personas en
ocho países/regiones, frente a 15,7 millones en 15 países/regiones); -
conmociones económicas (más de 30 millones de personas en 21 países/regiones, pasando
de más de 40 millones en 17 países/regiones a más de 40 millones en 2020,
debido principalmente al impacto de la pandemia de coronavirus [COVID-19]); -
conmociones económicas (más de 30 millones de personas en 21 países/regiones,
pasando de más de 40 millones en 17 países/regiones a más de 40 millones en
2020, debido principalmente al impacto de la pandemia de coronavirus). Estos
son los motivos que nos llevan a abordar nuestra realidad desde una perspectiva
global de la seguridad alimentaria.
La
realidad mundial de los alimentos lo podemos contextualizar en varios
aspectos: El primero centrado en el
actual eje político – social - económico en el mundo, que está agitado, debido
a la transferencia o repartición de poder entre EEUU, China, Rusia, Europa; el
segundo está en el clima, que muestra su alteración progresiva en todos los
ámbitos del planeta tierra y que nos dirige al tercero que se ocupa de los
límites planetarios y el cuarto que lo abordamos desde el índice de
desperdicios de los alimentos.
Primero,
lo referido al eje político – social - económico, podemos indicar que según
Schmalz et al. (2022) refieren que desde el 2017, han aumentado los conflictos
con EE. UU. y la UE sobre los proyectos de inversión y acceso al mercado para
las corporaciones chinas. Además, muestran cómo los conflictos comerciales
entre estos países podrían cambiar la estrategia de globalización impulsada por
el estado de China y contribuir a la reestructuración de la economía mundial.
Las empresas emergentes chinas (de propiedad estatal) se están convirtiendo en
poderosos competidores. Además, Bjørnskov y Voigt (2022) agregan que las
democracias presidenciales son más capaces de hacer frente a los desastres
naturales que las parlamentarias en términos de vidas salvadas, mientras que
las autocracias lo hacen significativamente peor en el sentido de que los
derechos de empoderamiento se ven seriamente afectados después de un desastre
natural. Por otro lado, Spiegel, Kovtoniuk y Lewtak (2023) que indican que,
para garantizar una implementación integral y ampliada de la nueva legislación
de salud emitida el 2022, en Ucrania, requiere de una financiación coordinada
del gobierno y de los donantes con estricta responsabilidad para reducir la
corrupción y el despilfarro. A esto hay que sumar el efecto sobre la
distribución de alimentos y finalmente Skipper (2022) agrega que una invasión,
una guerra, una pandemia y una crisis financiera. han conspirado para ejercer
una presión sin precedentes sobre los sistemas alimentarios mundiales. Además,
informan que Ucrania y Rusia producen juntos el 14% del trigo del mundo y el
30% de las exportaciones de trigo del mundo, así como el 60% del aceite de
girasol del mundo. Y que por la guerra que libran dichos suministros estarían
bajo amenaza.
Segundo,
respecto al cambio climático Jägermeyr et al. (2021) refieren que a fin de
siglo la productividad media de maíz cambia de +5 % a −6 % y de +1 % a −24 %,
lo que se explica por proyecciones climáticas más cálidas y sensibles, agregan
además que la emergencia de los impactos climáticos afectara consistentemente
en las nuevas proyecciones, antes del 2040 para las principales regiones
agrícolas del mundo. IPCC (2022) es el organismo de las Naciones Unidas para
evaluar la ciencia relacionada con el cambio climático y reportan que, si el
aumento de la temperatura supera los 1,5 °C, se perderán para siempre
ecosistemas enteros en las regiones polares, costeras y montañosas. Incluso con
un calentamiento de 1,5 °C, del 3 % al 14 % de todas las especies terrestres
enfrentarán un riesgo muy alto de extinción, y un mayor calentamiento hará que
estas amenazas a la biodiversidad sean aún peores. Afirman incluso que una
pequeña cantidad de calentamiento adicional amenazará la producción de
alimentos y la seguridad alimentaria, debido a olas de calor, sequías e
inundaciones más severas y frecuentes, junto con el aumento del nivel del mar.
El
tercero lo evidenciamos en los aportes de Steffen et al. (2015) que indican
que, el sistema climático es una manifestación de la cantidad, distribución y
balance neto de energía en la superficie de la Tierra; la biosfera regula los
flujos de materia - energía en el sistema terrestre y aumenta su resiliencia
ante cambios abruptos y graduales. Los niveles de perturbación antropogénica de
cuatro de los procesos/característicos del sistema terrestre (cambio climático,
integridad de la biosfera, flujos biogeoquímicos y cambios en el sistema
terrestre) superan el límite plantario propuesto. Y en Pierrat et al. (2023)
que indican, que el consumo de agua dulce de las comunidades humanas conduce a
la mayor pérdida de agua en los ríos, seguido de los acuíferos y el suelo, al
mismo tiempo que aumenta la evapotranspiración poniendo en riesgo dicho
recurso.
El
cuarto contexto se muestra en el Programa de las Naciones Unidas para el Medio
(PNUMA), que reporta que el índice de desperdicios de alimentos del 2021 fue de
931 (17%) millones de toneladas de alimentos desperdiciados en el mundo (PNUMA,
2023). Además, el 17 de noviembre del 2022, las Naciones Unidas publicó que en
el Perú más de la mitad de la población (16,6 millones), carece de acceso
regular a los alimentos. Ya en el 2021 anunciaba que el 31% vivía con
inseguridad alimentaria y el 20% con inseguridad alimentaria aguda, lo implica
que han reducido la calidad y cantidad de sus alimentos. Ellos refieren que la
causa principal es la pobreza y además a la pésima gestión del gobierno,
hábitos alimenticios e insumos agrícolas (ONU 2022). Y para el Perú, el PNUD
(2019) reporta que los distritos de muy bajo IDH se encuentran en la sierra: 7
de ellos en La Libertad; Lima tiene 4; Cajamarca y Piura presentan 3 distritos
cada uno; Ayacucho, Ancash, Lambayeque, Cusco y Puno con dos distritos cada uno
y finalmente con 1 distrito Huancavelica, Apurímac y Junín. Además, agregan que
los distritos con mayor IDH se encuentran en Lima Metropolitana y demuestran en
parte el modelo centralista que desarrolla el gobierno peruano.
Por lo
tanto, debemos entender que la evidencia científica nos invita a tomar medidas
que por un lado ayuden a mitigar los efectos del antropoceno al ambiente y por
otro a tomar medidas de prevención para el aseguramiento de la alimentación
entre muchas otras cosas. Por tal motivo nos hemos trazado el objetivo de
realizar un diagnóstico situacional de nuestro país frente a los riesgos de
inseguridad alimentaria y hacer algunas propuestas que contribuyan en las
políticas y gestión pública.
Se
ha realizado la búsqueda de referentes científicos en las revistas Nature, Science
American Journal of Climate Change y en buscadores como Scientific Research an
Academic Publisher, Scielo y en la página web del Google académico. Así mismo
se hicieron revisiones de reportes periodísticos y paginas web de diferentes
instituciones públicas. para todos los casos se utilizó las palabras clave
seguridad alimentaria.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Cambio
climático
El
cambio climático es actualmente el problema más preocupante para nosotros dado
que su impacto afecta la seguridad alimentaria de manera directa o indirecta y
su impacto es en la totalidad de la población, obviamente los de menos recursos
económicos siempre son los más afectados. Es por ese motivo que enfocaremos
esta situación en nuevos fenómenos naturales y tradicionales.
Respecto
a los nuevos fenómenos naturales tenemos el reporte de Rosenzweig y Parry,
(1994) indicaban que es probable que los países en desarrollo soporten la peor
parte del problema, y las simulaciones del efecto de las medidas de adaptación
por parte de los agricultores implican que estas harán poco para reducir la
disparidad entre los países desarrollados y en desarrollo. Situación que en
realidad se ha cumplido para nuestro país. Agregamos los estudios de
Bloemendaal et al. (2022) que, utilizando el modelo de generación de ciclones
tropicales sintéticos, pronosticó que, en las cuencas del pacífico sur son
propensas a un mayor aumento de probabilidad de ciclones tropicales de
categoría 3 y que van en aumento con el cambio climático. La predicción
científica realizada por dichos investigadores también se ha cumplido con el
impacto del ciclón Yaku que afecto la región norte de nuestro país.
Respecto
a los eventos tradicionales, tenemos el fenómeno “el niño”, los desbordes de
los ríos y los huaicos. respecto al fenómeno “el niño”, el ENFEN (2023) en su
informe del 30 de marzo indica: se continuará desarrollando “El niño costero”
probablemente hasta julio con débil magnitud; aumentarán las precipitaciones en
costa central y norte y en consecuencia para abril aumentará el caudal de los
ríos de Lambayeque, chira, Piura y Tumbes provocando inundaciones de sus
entornos. Recomiendan considerar siempre las fuentes oficiales para
prevenciones y reducción de desastres. También frente a estos eventos
tradicionales, nuestras autoridades solo responde con donación de canastas de
alimentos, así tenemos que el INDECI (2023) informo que entregó un total de 231.53
toneladas de Bienes de Ayuda Humanitaria a los gobiernos regionales de Piura
con 75.96 TN, seguido de Cajamarca (43.14 TN), Lima (42.16 TN), Áncash (24.13
TN), La Libertad (20.17 TN), Lambayeque (19.18 TN) y Tumbes (6.79 TN), en
beneficio de 15 230 personas afectadas ante las precipitaciones pluviales
registradas por el paso del ciclón Yaku.
Situación
social, económica y política
La
situación social económica y política frente a la inseguridad alimentaria en el
Perú está caracterizada por la “caridad” así se demuestra en las siguientes
evidencias:
El
informe N°12 del INDECI frente a los efectos del ciclón Yaku, que registra las
donaciones de 700 canastas de alimentos del ministerio de energía y minas,
también la de desarrollo e inclusión social (MIDIS) para las familias
damnificadas de Carabayllo (distrito de Lima); a ello se sumaron la ministra de
Desarrollo Agrario y Riego; así como de congresistas y del alcalde de
Carabayllo. A nivel nacional las donaciones fueron realizadas por el Instituto
Nacional de Defensa Civil (INDECI), tal como se mencionó anteriormente.
Otra
evidencia es la actividad que se hace frente al fenómeno natural anual del frio
en la sierra sur del Perú y que el 16 de mayo del 2022 el Congreso de la
República llevo a cabo la campaña institucional 'Unidos contra el frío', en ese
contexto, los legisladores, como parte de su función fiscalizadora, tuvieron la
oportunidad de pedir información a las autoridades del Poder Ejecutivo y de los
gobiernos regionales y locales sobre qué acciones efectúan para prevenir y
responder ante las emergencias originadas por los fenómenos naturales en las
diferentes regiones del país, indico el Diario oficial el Peruano (2022). Cabe
indicar que estas actividades ya se podrían decir que son parte de las actividades
culturales del congreso, puesto que se hacen todos los años y en cada gobierno
de turno.
Además
respecto al ámbito gubernamental podemos mencionar que el Perú cuenta con
instituciones técnicas y científicas relacionadas a la prevención y evaluación
de riesgo de desastres, como el SENAMHI (Servicio Nacional de Meteorología e
Hidrología del Perú), el ANA (Autoridad Nacional del Agua), el IMARPE
(Instituto del Mar del Perú), la DHN (la Dirección de Hidrografía y Navegación
de la Marina de Guerra del Perú), el IGP (Instituto Geofísico del Perú), el
INGEMMET (Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico), el CENEPRED (Centro
Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres) y el
CCFFAA (Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas). Finalmente se cuenta con la
comisión “niño costero” creada por el congreso en el 2017 y la ARCC (Autoridad
para la Reconstrucción con Cambios), esta última tiene la misión de restituir
toda la infraestructura física dañada y destruida por el Fenómeno de El Niño
Costero en 13 regiones del país: Áncash, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca,
Huancavelica, Ica, Junín, La Libertad, Lambayeque, Lima, Loreto, Piura y Tumbes.
Una
actitud muy particular:
Después
de haber realizado las donaciones a los distritos de Lima, afectados por las
inundaciones provocadas por el ciclón Yaku, el alcalde de Lima anunció para el
pueblo, la primera playa artificial en el distrito de San Juan de Lurigancho y
que en 45 días estará dando servicios; también indico realizar el proyecto de
servicios para mascotas llamado VetSol (Veterinaria Solidaria) ofreciendo
adopción, vacunación, esterilización, desparasitación entre otros. Y por último
menciono la creación de la tarjeta ClubMet para descuentos en los distintos
Clubes Metropolitanos, museos, teatros, Parque de la Exposición, hospitales de
la Solidaridad, etc (Diario Gestión 2023). Esto, nos debe llevar a entender el
grado de despreocupación que existe de la autoridad edil frente a la seguridad
alimentaria.
Es
necesario mencionar que la programación multianual de inversiones de las
municipalidades provinciales de las diferentes regiones del Perú no cuenta con
el rubro de seguridad alimentaria para los eventos de desastres naturales. A
ellos debemos agregar el problema que atraviesan las municipalidades así lo
indica el instituto peruano de economía (2022) que refieren que entre el 2015 y
el 2022, las municipalidades solo invirtieron el 61% de sus recursos
presupuestados, lo cual es inferior a la tasa de ejecución del Gobierno
Nacional (79%) y de los gobiernos regionales (65%). La baja productividad de
los funcionarios municipales, se debe a que muchos de ellos no cuentan con un
contrato permanente, enfrentan un entorno laboral con alta rotación y están
poco capacitados y que por lo tanto se requiere con urgencia potenciar el
servicio civil a nivel local que permita cerrar las brechas de productividad
existentes.
Queremos cerrar este aspecto social -
económico y político, con un problema grande que tiene el Perú según Quiroz
(2013), este es la corrupción, puesto que ella impacta en gran medida en el
presupuesto nacional indicando que entre 30 a 40% de este se pierde anualmente
en actos de corrupción, además indica que un país como el nuestro para crecer
necesita alrededor del 8% de su producto bruto interno y que aproximadamente el
4% se lo lleva la corrupción y por lo tanto, esta debe ser controlada, si
queremos que el estado peruano se modernice y crezca. Es lamentable decir, pero
esta situación sigue en el mismo sendero así lo muestra el diario el Comercio
(2023) indicando que, desde el 1 de enero del 2023, los nuevos gobernadores
regionales han designado al menos a 18 directores y gerentes de salud en sus
respectivas regiones. Los órganos que dirigen estos altos funcionarios son los
responsables de formular y proponer las políticas regionales de salud,
coordinar acciones de salud integral, evaluar establecimientos de salud, entre
otras funciones y casi la mitad de estos directores y gerentes regionales de
salud tiene cuestionamientos de corrupción.
Salud
y ambiente
El
cambio climático tiene efectos múltiples, pero para nuestro caso nos
centraremos en cuatro: la infraestructura de los servicios de salud, la salud
de las personas, la situación étnica y la seguridad alimentaria.
Para
el primer caso, el MINSA (2023) informa que entre el 26 de setiembre y el 28 de
marzo del 2023, por las lluvias se han afectado 943 instituciones prestadoras
de servicios de salud en los departamentos de Piura 21%, Lima 16.5%, Ancash
14%, Lambayeque 9%, Cajamarca 7%, La Libertad 13%, Arequipa 5%, Tumbes 4%,
Ayacucho 2%, Huancavelica 2% y los departamentos restantes tienen menos del 2%.
Esto nos debe permitir entender lo frágil que se encuentra nuestros servicios
de salud frente al cambio climático y que es necesario reestructurar para una mejor
eficiencia en situaciones de lluvias intensas.
Al
término de la presente revisión, INDECI-COEN (2023) el 22 de mayo del 2023, informo
que por efectos del NIÑO COSTERO varios distritos de Piura (Canchaque, Sechura,
Suyo, Huarmaca, Santo Domingo, Morropón, Vice, Santa Catalina de Mossa,
Pacaipampa, entre otros), se encuentran con el transito restringido, de igual
manera sucede en varios distritritos y sectores rurales del departamento de
tumbes Además, INDECI indica que el ministerio de defensa da Apoyo logístico a
través de medios aéreos para evacuación de personas aisladas, transporte de bienes
de ayuda humanitario (Donación Fondo General Contravalor Perú – Japón) y
sobrevuelos de reconocimiento en todas las zonas afectadas. También se
evidencia en el informe que no se aborda la seguridad alimentaria y
probablemente consideran que se soluciona habilitando las vías de acceso lo
cual es cierto pero dicha estrategia toma tiempo que va de horas a varios días
o semanas. Lo cual genera desabastecimiento y especulación de precios en los
productos de primera necesidad como son los alimentos.
Respecto
a la salud de las personas, nosotros no nos centraremos en los pacientes con
enfermedades puesto que todos los establecimientos de salud se encuentran
organizados para ellos, mediante sus diferentes programas. Nosotros queremos
centrarnos en las personas que podrían verse afectadas por los desastres
naturales y la inseguridad alimentaria porque en este aspecto no solamente se
afectan los de escasos recursos económicos sino a todos, debido al
desabastecimiento de los alimentos y eso es el motivo por el que presentamos a
los siguientes reportes científicos: Prembrey et al. (2006) respecto al
suministro de alimentos, indico que la escases o abundancia de alimentos para
el caso del abuelo paterno solo se relacionó con la tasa de mortalidad de los
nietos, mientras que la alimentación de la abuela paterna solo se asocia con la
tasa de mortalidad de las nietas y que esto tiene efectos transgeneracionales
observaron con la exposición durante el período de crecimiento lento para ambos
abuelos o la vida fetal/infantil (abuelas), pero no durante la pubertad de
ninguno de los abuelos, llegando a la conclusión de que existen respuestas
transgeneracionales específicas del sexo en los seres humanos y que
probablemente estas transmisiones están mediadas por los cromosomas sexuales, X
e Y. Agregamos las investigaciones de Gantenbein y Kanaka-Gantenbein (2022)
ellos indican que se debe prestar especial atención a los hábitos de vida
saludables de los jóvenes, especialmente las mujeres en edad reproductiva y
estos patrones de estilo de vida saludable deben mantenerse durante todo el
embarazo para proporcionar la mejor base para la salud somática y mental de las
generaciones futuras. Cuidar también la promoción de la lactancia materna y los
hábitos alimentarios saludables en la infancia, la niñez y la adolescencia,
junto con la actividad física, pueden minimizar aún más el riesgo de futuras enfermedades.
También se considera oportuno indicar que los desastres naturales provocan
estrés en las personas y efectos muy negativos en las mujeres embarazadas, así
lo menciona Yehuda et al. (2005) centrándose en la disfunción del eje
hipotálamo – pituitaria - suprarrenal en el trastorno de estrés postraumático,
varios genes están involucrados en la señalización de glucocorticoides que se
expresan de manera diferencial entre aquellos que han sufrido trastorno de
estrés postraumático, observándose variaciones en los niveles de cortisol según
la edad de los hijos de las mujeres que estuvieron embarazada en el tercer
trimestre cuando sufrieron el estrés.
Lo
correspondiente a la diversidad étnica y debido que aquí se encuentra la
población más afectada por la inseguridad alimentaria durante los desastres
naturales u otras situaciones, podemos mencionar los estudios realizados por
Herrera-Añazco et al. (2022) ellos refieren que el Perú es un país
multicultural en América Latina y Aunque el gobierno mejoró la cobertura del
seguro de salud, este no ha mejorado el uso de los servicios de salud,
encontrándose que ser paciente quechua o hablante de una lengua originaria se
incrementó al doble la probabilidad de no acudir a los servicios de salud por
maltrato y ser de etnia aimara se incrementó al triple dicha probabilidad. Esta
situación podría afectar una adecuada asistencia alimentaria en casos de
desastres naturales. Pero lo más preocupante es que solamente se los trata con
“caridad” es decir con la donación de una bolsa de alimentos o ropa de abrigo
dependiendo del desastre, si el huaico se llevó sus pertenencias o si hace
demasiado frio respectivamente.
Finalmente,
el MINSA (2022) considera dentro del análisis de vulnerabilidad al factor de
fragilidad y como índice de la pobreza que para el análisis de la vulnerabilidad
socioeconómica ha considerado a la pobreza monetaria, siendo pobres las
personas cuyo gasto per cápita es insuficiente para adquirir una canasta básica
de alimentos y no alimentos (vivienda, vestido, educación, salud, transporte,
entre otros). El MINSA tampoco tiene programa alguno de seguridad alimentaria,
probablemente porque ello no es su objeto de trabajo y lo trata dentro del
ámbito educativo como un aspecto de promoción de la salud, situación que
consideramos de mucha preocupación frente a las situaciones de cambio
climático, social y político y que presenta las tres escalas de inseguridad
alimentaria establecida por la FAO en sus diferentes regiones.
Sugerencias
El
MINSA en coordinación con defensa civil, ENFEN, INDECI, INEI y las fuerzas
armadas debería asumir roles más comprometidos con la seguridad alimentaria,
dada que ellos tienen la posibilidad de una identificación precisa y justa de
la población en general.
El
gobierno debería alentar a la capacitación en competencias culturales para el
personal se salud y considerar contratar a personal más representativo de la
población (Herrera-Añazco et al., 2022).
Mejorar
las interfaces ciencia-política para la transformación de los sistemas
alimentarios (Skipper 2022).
Educación
a la población a nivel familiar para que aprendan a conservar alimentos en
temporadas de lluvias, heladas y friajes entre otros.
Educación
y control a los comerciantes – vendedores de alimentos para evitar la
especulación de precios.
Reorganización
del modelo de producción agrícola de tal manera que asegure: diversidad,
sostenibilidad de la producción y precios justos tanto para el productor como
para el consumidor.
Gestionar
e invertir en la acuicultura como una fuente alternativa de alimento, siendo
esta más sostenible con el ambiente.
Invertir
en educación y tecnología para la producción de algunos alimentos en el hogar.
El
gobierno central, regional y municipal deben establecer políticas y gestión
para la seguridad alimentaria.
El
gobierno central, regionales y los respectivos municipios deben de establecer
nuevas vías que provean adecuada seguridad alimentaria para situaciones de
emergencia.
CONCLUSIONES
El Perú
no tiene política ni gestión pública para la seguridad alimentaria de la
población en general, para hacer frente a las situaciones de desastres
naturales u otros.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS